Ví por primera vez The Last Dragon casi al finalizar la década de los 80’s (la película data del 85) y hoy volví a verla en Cinemax. Cuando me preguntan de qué trata, me es muy difícil el contarla, pero intentaré hacerlo.
Leeroy Green, un joven negro del Harlem neoyorquino, quien aprendió artes marciales de un anciano japonés, está en la búsqueda del último poder como guerrero. No le va a ser fácil, sobre todo por la presencia de Sho’nuff (el shogun de Harlem), un villano que viste como general del medioevo nipón, y la de Eddie Arkadian, un productor musical que quiere ver muerto a Leeroy luego de una afrenta.
Y si los malos son de los más extraños, hay que agregar que en esta película también hay romance: el joven Green, interpretado por el experto en artes marciales Taimak, se enamora de la famosa DJ Vanity (la bella Laura Charles), quien está a cargo de un concurso de breakdance.
Encontré la siguiente reseña en Allmovies.com que puede darles más luces sobre esta cinta: “Esta singular mezcla de kung-fu, blaxploitation, película familiar y video musical puede parecer difícil de manejar, en teoría, pero en verdad es bastante entretenida”.
Valgan verdades, me divertí bastante al volver a ver ‘El último dragón’ (así se llamó en castellano). Sobre todo el final, cuando Leeroy encuentra lo que estaba buscando: su maestro interior.
Me olvidaba decirlo: también hay personajes chinos ¡que hablan jerga afroamericana y cantan funky! ¡Y Leeroy viste como coolíe chino!
Leeroy Green, un joven negro del Harlem neoyorquino, quien aprendió artes marciales de un anciano japonés, está en la búsqueda del último poder como guerrero. No le va a ser fácil, sobre todo por la presencia de Sho’nuff (el shogun de Harlem), un villano que viste como general del medioevo nipón, y la de Eddie Arkadian, un productor musical que quiere ver muerto a Leeroy luego de una afrenta.
Y si los malos son de los más extraños, hay que agregar que en esta película también hay romance: el joven Green, interpretado por el experto en artes marciales Taimak, se enamora de la famosa DJ Vanity (la bella Laura Charles), quien está a cargo de un concurso de breakdance.
Encontré la siguiente reseña en Allmovies.com que puede darles más luces sobre esta cinta: “Esta singular mezcla de kung-fu, blaxploitation, película familiar y video musical puede parecer difícil de manejar, en teoría, pero en verdad es bastante entretenida”.
Valgan verdades, me divertí bastante al volver a ver ‘El último dragón’ (así se llamó en castellano). Sobre todo el final, cuando Leeroy encuentra lo que estaba buscando: su maestro interior.
Me olvidaba decirlo: también hay personajes chinos ¡que hablan jerga afroamericana y cantan funky! ¡Y Leeroy viste como coolíe chino!
Estimado -y usualmente bien enterado Pellín- creo que vacilas al calificar de sui géneris a "El último dragón". Valgan verdades esa es una de mis películas favoritas del cine de acción y bien merece el rótulo de fantástica (por fantasiosa y archi entretenida). Te recomiendo además el filme "Rescate en el barrio chino" (con el vaquero Kurt Rusell), es genial también. Saludos cordiales.
ResponderBorrarBueno, mi estimado Ronny, sui generis significa literalmente "único en su especie": !y eso es "The Last Dragon"¡ La peli que me mencionas (Rescate en el Barrio Chino) también está entre mis favoritas de los 80's. Slds
ResponderBorrarPD Más sobre sui generis en Wikipedia.
a xumas, con cachita es el comentario. O sea que es "única en su especie", pero qué, únicamnte aburrida, únicamente cómica, únicamnte genial, unicamnte, densa, ya pessssss, claridad pellín. Otra cosilla, bien yuca comentar en tu blog. Primero hay que entrar al link permanente y después comentar... que pesado (sin alusiones eh)
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